martes, 22 de enero de 2019

Quemando el arado.



Quemando el arado.
     Creo que todos sabemos que es un arado; pero por si alguno no sabe:
Arado: (Viene del latín aratrum) Es una herramienta de labranza utilizada en la agricultura para abrir surcos en la tierra y remover el suelo antes de sembrar.
       Creo que muchos de los que leemos este blog, algunos están familiarizados con este tipo de trabajo para labrar la tierra; así mismo hay diferentes trabajadores que hacen diferente tipo de trabajo y usan diferentes herramientas, para poder trabajar y llevar el sustento diario a la familia.
     Qué tal sería si alguien le dijera, quema tus herramientas y trabaja solo para Dios. ¿Estaría dispuesto a dejarlo todo por servir a Dios?
     Veamos uno de los casos que registra las Sagradas Escrituras referente a esto:
Es el caso de Eliseo el profeta cuando fue llamado para servir a Dios. Quemando sus herramientas de trabajo, lo dejo todo por obediencia a quien lo llamaba:
     El trabajo de Eliseo era: Labrar la tierra con un un arado de bueyes. Cuando fue llamado por Elias el profeta. Fue a despedirse de sus padres y termino con su herramienta de trabajo, quemando la madera del arado, cocinó la carne de los bueyes. O sea que dejó completamente ese trabajo; quemándolo todo, para no tener ninguna tentación de regresar a lo que hacía antes.
1 de Reyes 19:21.
21- Y se volvió, y tomó un par de bueyes y los mató, y con el arado de los bueyes coció la carne y la dio al pueblo para que comiesen. Después se levantó y fue tras Elías, y le servía.
     Vemos la decisión de Elias, de servir y atender el llamado de Dios. Este es un ejemplo, que hemos seguido como siervos de Dios, ya que hemos sido llamados para servir a Dios; dejando todo atrás y confiando ciegamente en Dios: Que él no nos va ha dejar y es nuestro proveedor (Shadai).
Si usted está pensando en dejar de servir a Dios, vea este otro hermoso mensaje de motivación.
San Lucas 9:62.
62- Y Jesús le dijo: Ninguno que poniendo su mano en el arado mira hacia atrás, es apto para el reino de Dios.
     Vemos que Dios se agrada con los que siguen para adelante y no tienen ninguna excusa para regresar, pero así también, no se agrada de los que no sirven y dice que no es apto para el reino de Dios.
Espero en Dios no esté pensando en regresar, renueve su mente y siga para adelante y no para atrás.
Bendiciones.
Pastor, Luis Molina.
MCDD. Una iglesia para toda la familia.

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