La mentira.

La mentira.
     ¿Cuántos hombres y mujeres en la tierra no mienten?. Tanto hombres como mujeres, algunos negarán que mienten, ¡La verdad es: Que solo Dios y ellos sabrán si lo que afirman es cierto o no.
     Según las sagradas escrituras, que es la  palabra revelada que Dios, nos ha dejado escrita, para edificación y corrección para poder vivir como El quiere dice así:
1 de Juan 1:10.
10- Si decimos que no hemos pecado, le hacemos a él mentiroso, y su palabra no está en nosotros.
Sabemos que en los diez mandamientos,.
Éxodo 20:16. No hablarás contra tu prójimo falso testimonio. 
Efesios 4:25.Por lo cual desechando la mentira, hablad verdad cada uno con su prójimo; porque somos miembros los unos de los otros.
     Vemos y entendemos que el mentir es un pecado, y el que diga que no miente ya está pecando, así es que la mentira es pecado. Muchas personas toman la mentira a la ligera; muchos nos divertimos con las bromas, porque queremos estar alegres por un momento, pero si se pone a pensar, las bromas son un montón de mentiras que decimos y confesamos, nos parece que es muy divertido, pero a la vez peligroso, ya que nos hemos acostumbramos tanto a mentir que ya no hay sensibilidad ni límite y ¡Hablamos muchas mentiras! y recordemos una vez más que la mentira es pecado.
     Tengamos cuidado, porque entre broma y broma, podemos estar acumulando pecado tras pecado y sabemos que el alma que pecare, esa morirá. He escuchado que a veces decimos ¡¡Dios sabe que estoy Jugando!! Es mejor prevenir que lamentar, porque hay otra escritura que lo hará pensar.
Apocalipsis 21:7-8.
7- El que venciere heredará todas las cosas, y yo seré su Dios, y el será mi hijo. 8- Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda.
     Para concluir, le quiero decir que no escribo esto para condenar a nadie, sencillamente lo hago para prevenir de que podamos caer sin darnos cuenta en algo de lo mencionado en este versículo que sacude a cualquiera. Como hombres y mujeres que amamos a Dios, es necesario que nos le pidamos a Dios que nos cuide y caer caer en lo mencionado anteriormente.
 ¡Yo quiero ser un Vencedor! ¿Y usted?
Bendiciones,
Pastor, Luis Molina,
"MCDD" Una iglesia para toda la familia.