Hablando acerca de la tecnología, que va de aumento en aumento, conversábamos con mi esposa y le pregunte, Para ti el teléfono celular es una bendición o una adicción, ella me respondió con una pregunta y me dijo, ¿Y para ti que es? Le respondí inmediatamente, ¡Es una bendición!
Pienso, si yo no tuviera teléfono celular, creo que no tendría la misma comunicación que tengo con los hermanos de la iglesia; porque cuando pienso, en alguno de ellos, los llamo para preguntar si están bien o también los llamo para algo que siempre tiene que ver con algo referente a la iglesia o alguna actividad y algunas veces para mandar una cita bíblica o un mensaje que pueda ser de bendición para ellos y algunas veces alguna cosa divertida. Pero a la vez si no lo tengo me hace falta.
Creo que a todos nos pasa, si olvidamos el teléfono en casa, inmediatamente regresamos a traerlo. En estos tiempos modernos los teléfonos inteligentes están tan avanzados que en cualquier momento sin importar la distancia podemos comunicarnos a cualquier parte del mundo.
Pero el problema está, que no se usa solo para comunicación sino que también se usa para diversión o entretenimiento, y es ahí donde se vuelve problema, ya que muchas personas pasan horas y horas usando las diferentes aplicaciones para perder el tiempo en juegos, que no edifican en nada a las personas; hay peligro de caer en la trampa de la comodidad y el auto engaño, de que el teléfono se vuelva una adicción.
¿Porque el tema?, creo, que para alguien que quiere consagrar su vida a Dios, tiene que dedicarse más tiempo en busca del conocimiento de su palabra ya que El, nos ha dado la vida y todo lo que tenemos. ¿A quien le está consagrando su vida? ¡Al teléfono o a Dios!, ¿Quien es el que le abre las puertas de Cielo, el teléfono o Dios?
Mateo 6:33.
33- Mas buscad primeramente el reino de Dios y su Justicia, y todas las cosas os serán añadidas.
En la vida, para todo hay tiempo, piense por un momento a que le está dedicando más tiempo, ¡¡Será que Dios le está hablando para que se consagre a Él y no al teléfono o a cualquier otro aparato electrónico!
Tener teléfono no es pecado, el pecado seria que puede caer en la idolatría en lugar de adorar a Dios empiece adora a su teléfono, piense y medite al respecto.
Bendiciones.
Pastor, Luis Molina.
“MCDD” Una iglesia para toda la familia.
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