Deseos carnales.

Deseos carnales.
     A veces, hacemos cosas que para nosotros es divertido, o simplemente para salir de lo común, pero no nos ponemos a pensar, si nuestras acciones agradan o no a Dios. Pensemos, antes de caer en pecado.Veamos las recomendaciones que nos hace el apóstol San Pedro en su carta.
Primera de San Pedro 2:11-12.
11- Amados, yo os ruego como a extranjeros y peregrinos, que os abstengáis de los deseos carnales que batallan contra el alma, 12- Manteniendo buena vuestra manera de vivir entre los gentiles; para que en lo que murmuran de vosotros de malhechores, glorifiquen a Dios en el día de la visitación, al considerar vuestras buenas obras.
     Hay una batalla dentro de nosotros la cual, la carne dice una cosa y el espíritu dice otra, y sin pensarlo tanto, caemos en las obras de la carne, que en primer lugar no le agradan a Dios, ya que son pecado, además sabemos, según lo dicen las Sagradas escrituras, que todos los que practican las obras de la carne, no heredarán el reino de Dios. Gálatas 5:21
     Para muchos es muy divertido, engañar a su cónyuge, divirtiéndose con otra pareja; esto se llama adulterio y es pecado, al igual que la fornicación, estos pecados carnales pueden conducir al hombre a otros pecados como son la inmundicia, lascivia, idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías, envidias, homicidios, borracheras, orgías y cosas semejantes, y los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios.
     Por todo lo anterior es necesario que cualquier cosa que pensamos que es divertido; antes de hacerlo, pensemos bien, ya que después, nos lamentamos y puede ser demasiado tarde.
     Los deseos de la carne son peligrosos, hagamos como nos recomienda el Apóstol San Pedro, apartemonos de los deseos carnales para evitar, pecar y desagradar a Dios. Seamos sabios y evitemos caer en condenación por causa del pecado.
Bendiciones.
Pastor, Luis Molina.
"MCDD" Una iglesia para toda la familia.