¡Sumergirse en el río de Dios!

    Meterse a un río, es diferente a sumergirse en el; dependiendo de la profundidad, usted podrá caminar, nadar, navegar, o transportarse de una ciudad a otra.

    Que nos dicen las sagradas escrituras al respecto.  En el libro de Ezequiel.

Ezequiel 47:3-5.

3-Y salió el varón hacia el oriente, llevando un cordel en su mano; y midió mil codos, y me hizo pasar por las aguas hasta los tobillos. 4- Midió otros mil, y me hizo pasar por las aguas hasta las rodillas. Midió luego otros mil, y me hizo pasar por las aguas hasta los lomos.

5- Midió otros mil, y era ya un río que ho no podía pasar, porque las aguas habían crecido de manera que el río no se podía pasar sino a nado.

    En este pasaje, nos muestra el Señor, a las diferentes profundidades que nos podemos meter en un río, así como este ejemplo, también nos podemos meter a la presencia de Dios, dependiendo, si usted se quiere meter hasta los tobillos, hasta las rodillas, hasta los lomos, o hasta, que se sumerja y tendrá que nadar, de la abundancia y la profundidad de las aguas. No se cual ha sido su decisión al respecto; yo en lo personal escojo sumergirme hasta que tenga que nadar y dejarme llevar por la presencia de Dios.

    Más adelante en el mismo capítulo habla de que ese río trae bendición y sanidad a nuestras vidas,  si permanecemos, sumergidos sin salirnos, nos irá muy bien, creo que si usted escoge, vivir sumergido en la presencia de Dios; ha escogido lo mejor ya que le traera bendicion, sanidad y vida eterna. veamos.

Ezequiel 47:9

9- Y toda alma viviente que nadare por dondequiera que entraren estos dos ríos, vivirá; y

habrá muchísimos peces por haber entrado allá estas aguas, y recibirán sanidad; y vivirá todo lo que entrare en este río.

    Es por eso tan importante meterse al río de Dios, pero no solo hasta los tobillos, sino que hasta que flote y se deje llevar por El.  Espero en Dios que piense en este pasaje de vivir sumergido en la presencia de Dios, ¡¡No se salga, busque la comunicación con El, todos los días de su vida y le garantizo que le irá mejor, en todas las cosas que decida hacer.

Bendiciones.

Pastor, Luis Molina.

“MCDD” Una iglesia para toda la familia.