!Amor para los ancianos!

Hay muchas personas, que aman a los ancianos, otras, no soportan sus defectos, necesidades, problemas, a otros, no les importan, si son o no ancianos, ignorandolos completamente..

    ¿Se ha puesto a pensar, que algún día, usted podría llegar a ser un anciano o anciana?.

Si no lo había pensado, en este día le quiero invitar y se pregunte, ¿Cómo trata a los ancianos, les está dando amor, se preocupa por ellos?;  especialmente si tiene a sus padres con vida. Es lamentable, como muchos, no piensan que un día serán ancianos, ¿qué dicen las sagradas escrituras acerca de los ancianos.

Proverbios 23:22.

22- Oye a tu padre, aquel que te engendró; Y cuando tu madre envejeciere, no la menosprecies.

Efesios 6:2-3

2- Honra a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento con promesa, 3- para que te vaya bien, y seas de larga vida sobre la tierra.

1 Timoteo 5:1-2.

1- No reprendas al anciano, sino exhórtale como a padre; a los más jóvenes, como a hermanos;

2- a las ancianas, como madres; a las jovencitas, como a hermanas, con toda pureza.

     Es lamentable, que muchos se han olvidado de los ancianos, ¡no se ponen a pensar!

en la importancia, que han sido en la vida; en alguna manera han formado parte de nuestra vida, ellos han sido como una escalera para que los jóvenes salgan adelante, ellos dedicaron tiempo para los niños, jóvenes, hasta que llegaron a ser adultos.

    Tristemente a los ancianos se les empieza a ver como estorbos, porque, cada dia que envejecen, van perdiendo sus facultades físicas y mentales, su visión, su movimientos empiezan a ser más lentos, etc, etc.  Los hijos que se olvidan y abandonan a sus padres, no se ponen a pensar que hay una ley natural de la siembra y la cosecha, además las sagradas escrituras dicen que no hagas para otro lo que no quieras para tí.

    Se ha visto en muchas familias, que los hijos ya mayores, descuidan completamente a sus padres, que velaron por ellos, cuando eran niños, hasta que llegaron ser adultos.

Olvidan las noches de desvelo, cuando estaban enfermos, cuando se quitaban un bocado de comida para dárselos, a veces dejaban de comprarse algo para ellos, con tal de dárselos a sus hijos, y se abstuvieron de muchas cosas para poderle darle lo mejor a sus niños, ¡¡piense en eso y no descuide a sus viejitos!!, ámelos y no se olvide de ellos, ayúdeles, deles amor ellos lo necesitan.

    He escuchado algunos decir: ¡¡Estos viejos se deberían de morir, ya están robando aire!!

Sin ponerse a pensar que ellos llevan ese camino. Espero en Dios esto le sirva para reflexionar y piense en su padres que ya son ancianos, ¡¡necesitan su amor, su comprensión, su ayuda!!, así, como ellos lo entendieron, le dieron su amor y su ayuda.

    Cuando mire a un anciano, por la calle abandonado, temblando, perdido, caminando muy lento.

¡¡Brindele ayuda, piense por un momento, que ese anciano o anciana,  podría ser usted!!

Bendiciones.

Pastor, Luis Molina.

“MCDD” Una iglesia para toda la familia.