Si usted ha estado en algún lugar donde hay nieve, sabe los paisajes tan bellos que se ven en los bosques, lagos y parques que se cubren de nieve durante el invierno.
Son panoramas tan lindos y tan blancos, que a veces se tiene que usar lentes obscuros para evitar la reflexión de lo blanco que se ve la nieve.
Leyendo, las sagradas escrituras, en el libro de Isaías 1, me encuentro con un pasaje muy conocido por muchos de ustedes, en el cual, si usted se pone a pensar, lo maravilloso y lo misericordioso que es Dios. ¡No hay palabras!, para expresar la gratitud, que debemos tener hacia Jesucristo, que entregó su vida por nosotros, en esa cruz la cual fue causa de dolor y sufrimiento para nuestro Salvador y Redentor.
Vemos que por causa del derramamiento de su sangre preciosa; nuestros pecados fueron perdonados y removidos de nuestra vida; por esa razón, es que ahora usted y yo podemos decir, Jesucristo nos ha limpiado y transformado completamente. Veamos que dice el libro de Isaías.
Isaías 1: 16-20
16- Lavaos y limpiaos; quitad la iniquidad de vuestras obras de delante de mis ojos; dejad de hacer lo malo; las
17- aprended a hacer el bien; buscad juicio, rectitud al agraviado, haced justicia al huérfano, amparad a la viuda.
18- Venid luego, dice Jehová, y estemos a cuenta: si vuestros pecados fueren como grana, como la nieve serán emblanquecidos; si fueren rojos como el carmesí, vendrán a ser como blanca lana.
19- Si quisiereis y oyereis, comeréis el bien de la tierra;
20- si no quisiereis y fuereis rebeldes seréis consumidos a espada; porque la boca de Jehová lo ha dicho.
O sea que cualquiera que fuese su pecado Dios está dispuesto a limpiarlo; si tan solo se arrepiente y recibe a Jesucristo. Si usted no se ha arrepentido de lo que ha estado haciendo, este es el mejor día para su vida, perdone, arrepiéntase y reciba a Jesucristo como su único y suficiente salvador.
Bendiciones.
Pastor, Luis Molina.
“MCDD” Una iglesia para toda la familia.