¡Consulte con la almohada!

     Esta es una expresión que se escucha muy a menudo; pero si se pone a pensar una almohada no habla, ni tiene sentimientos, muchas personas responden así, pero creo que es mejor decir lo voy a pensar y luego le tengo una respuesta. Honestamente creo que si alguien lo ve hablando con una almohada, se va a reír y pensará que usted esta un poco mal de la cabeza, o que le falta un tornillo ¡jajaja!. El rey Salomón, no lo consulto con la almohada, él fue  directamente a Dios y le pidió sabiduría, para tomar las decisiones correctas para gobernar bien el reino que Dios había puesto en sus manos. Creo que como personas cristianas, es lo que tenemos que hacer, ademas es bueno consultar con personas que tienen experiencia sobre los planes que usted tenga.

     En las Sagradas Escrituras vemos a Daniel doblando rodilla y preguntando a Dios referente al sueño que tuvo el rey Nabucodonosor, ya que sino le daba la interpretación correcta del sueño, mataría a todos los sabios y sacerdotes, con los cuales contaba en su reinado, lo puede leer en el libro de Daniel capítulo dos.

Daniel 2:5-6

5- Respondió el rey y dijo a los caldeos: El asunto lo olvidé; si no mostráis el sueño y su interpretación, seréis hechos pedazos, y vuestras casas serán convertidas en muladares. 6- Y si me lo mostrareis el sueño y su interpretación, recibiréis de mis dones y favores y gran honra.

Daniel 2:16

16- Y Daniel entró y pidió al rey que le diese tiempo, y que él mostraría la interpretación al rey.

     Daniel salió para ir a pedirle a Dios la revelación del sueño, para que no mataran a él y sus amigos. 

Daniel 2:19, Entonces el secreto fue revelado a Daniel en visión de noche, por lo cual bendijo Daniel al Dios del cielo.

  Vemos que Daniel no lo consultó con la almohada, sino que fue directamente con Dios, el cual le dio la respuesta y la interpretación del sueño, veamos que por haber consultado directamente con Dios le da la respuesta y Daniel es puesto en una posición de honor.

Daniel 2:48, Entonces el rey agradeció a Daniel, y le dio muchos honores y grandes dones, y le hizo gobernador de toda la provincia de Babilonia y jefe supremos de todos los sabios de Babilonia.

     Conclusión: Vemos que en lugar de consultar con la almohada, es mejor consultarle a Dios, para que tener una vida llena de los dones de Dios y además muchas bendiciones. 

Bendiciones.

Pastor, Luis Molina.

"MCDD" Una iglesia para toda la familia.