miércoles, 5 de octubre de 2016

No dejes para mañana lo que puedes hacer hoy.

No dejes para mañana lo que puedes hacer hoy.

Es un refrán en la sociedad que es mencionado desde hace muchos años, mi mama, mi papa eran de las personas que lo practicaban y me lo inculcaron en mi vida.

También en las sagradas escrituras menciona algo parecido, en el libro de los proverbios capítulo 3:28 dice así:
Proverbios 3:28
28 No digas a tu prójimo: Anda, y vuelve, Y mañana te daré, Cuando tienes contigo qué darle.

Creo que es un buen hábito que debe formar parte de nuestro diario vivir, ya que de esa forma nos ayudará a ser responsables en todo lo que hagamos todos los días de nuestra vida.

Hace algún tiempo atrás, tuve una mala experiencia, tenía que mandar una carta para una ayuda que recibiría por parte del gobierno y por no mandarla al tiempo requerido, me costó perder esa ayuda que recibiría. Cuando me llegó la carta para llenarla de los requisitos que me pedían, pensé dentro de mi, mañana lo hago; después se me olvidó, así pasó el tiempo uno y otro día, después cuando en realidad la mandé ya se había pasado una semana de la fecha indicada, lo cual me afectó grandemente ya que perdí la oportunidad de recibir esa ayuda.
Así mismo le puede pasar a usted con alguna situación por la cual este pasando, por lo regular hay un tiempo de entrega para hacer las cosas y por estarlo pensando antes de hacerlo nos podemos perder la oportunidad que Dios nos quiere dar, así mismo cuando se invita alguna persona a recibir a Cristo, las personas siempre dicen, “mañana lo hago” sin ponerse a pensar que mañana puede ser muy tarde, también pasa con los boletos para viajar en avión, si uno no esta a tiempo o se equivoca de día, se queda sin poder volar al destino que tenía pensado.
Hoy lo invito a que no deje para mañana los planes que puede hacer hoy, aproveche la oportunidad, recuerde que hay tiempo para hacer todo, no espere mas y decídase hacerlo hoy.

Así mismo si no a recibido a Jesucristo como su salvador hágalo hoy, no sea que este sea el último día de su vida, después de la muerte ya no hay nada que pueda hacer, aproveche hoy que está vivo, esto me recuerda a una anciana que le ofrecí el regalo de recibir a Jesucristo como su Salvador y Redentor, su respuesta fue que otro día también lo podía hacer y no lo quiso hacer, al día siguiente ella viajaría en autobús a su país de origen, pero lamentablemente ese autobús sufrió un accidente y de las 50 personas que iban en el viaje solo dos personas perdieron la vida, ella y otra persona que viajaba en el asiento frente a ella.
Dios le dio la ultima oportunidad pero no aprovechó el llamado de Dios, si usted no lo a hecho, no espere mas y hágalo hoy.

Bendiciones.
Apóstol y Pastor Luis Molina.
“MCDD” Una iglesia para toda la familia

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