El dolor de la traición.

El dolor de la traición.

     Si usted está leyendo este blog, le deseo toda clase de bendiciones a usted y familia; hoy y siempre.
     La traición es algo muy común en la vida; y suele suceder, con las personas que más ama o de la persona que menos se espera, o de alguien en donde usted a puesto su confianza.
     Esto pasa en los gobiernos, en las iglesias, en el ejército, entre hermanos, amigos y especialmente en los matrimonios.
     A nuestro Señor Jesús le paso, con Judas, cuando por treinta monedas de plata lo entregó. Mateo 26:15- (Judas) Y les dijo: ¿Qué me queréis dar, y yo os lo entregaré? y ellos le asignaron treinta monedas de plata. 16- Y desde entonces buscaba oportunidad para entregarle. 
Y hay muchos traidores que sin necesidad de dinero también lo hacen, como le pasó al rey David con su hijo Absalón, (2 de Samuel 15). Además, suele suceder en los matrimonios y es tan doloroso que si el cónyuge no está en capacidad o no quiere perdonar causa mucho dolor y estragos dentro de la familia. (A los traidores nunca les irá bien)
     Como humanos; podemos fallar, pero es mejor ser consciente del dolor tan grande que se le puede hacer a una persona a la cual se ama y siempre trae consigo consecuencias que se pueden alcanzar por dicho engaño. En el caso de Jesús, la traición produjo un suicidio (Judas se ahorcó) y la muerte de un inocente (Jesús). En el caso de los gobiernos, siempre habrá divisiones y grandes consecuencias que afectarán a un país; en el caso de las iglesias, siempre habrán divisiones, en las cuales muchos quedaran heridos. En los matrimonios conducirá a un divorcio, a la división y destrucción del núcleo familiar que vendrá afectar al traicionado y a los hijos que también son traicionados sea por el padre o la madre. Lo mejor es no ser una persona traicionera, ya que esto no le agrada a Dios y trae sus consecuencias que son divisiones, muertes, suicidios, y mucho dolor. Si usted está pensando o está punto de traicionar a alguien, no lo haga, no sea como Judas. Y si conoce a alguien que lo quiere hacer, no sea partícipe, dele un buen consejo y dígale, ¡No lo hagas, ya que vas a causar mucho daño!
Bendiciones.
Pastor Luis Molina.
MCDD. Una iglesia para toda la familia, para adorar y exaltar a nuestro Dios Todopoderoso.