Si usted esta afanado en el trabajo, en los estudios, o en cualquier área de su vida, esto le puede ayudar a pensar un poco mejor.
Muchas personas en todo el mundo tienen este tipo de ansiedad, ya sea que no les alcance el dinero para las deudas que tienen, o están preocupados por que no tienen que comer o vestir.
Las sagradas escrituras nos dan una recomendación y una solución a respecto; veamos que nos dice el libro de San Mateo capitulo 6:25
San Mateo 6:25.
25Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido?
Es tanta la preocupación de tener mas y mas cada día, que parece que se va a terminar el mundo y no lo vamos a lograr, o no vamos poder pagar tanta deuda a la cual nos hemos metido sin que nadie nos haya mandado; Lamentablemente esto pasa en todo el mundo a todas las personas que no reflexionan a respecto; debido a que trabajamos demasiado y nos preocupamos demasiado; de tanto trabajo y ansiedad, empezamos a descuidar a nuestros familiares, no solo en lo espiritual si no en todo, por tanto trabajo y preocupaciones, el resultado es lamentable, por estar cuidando una cosa se nos viene a bajo en otras áreas que descuidamos en nuestra vida, como por ejemplo, ya no le ponemos atención a nuestra esposa o esposo y casi siempre habrá alguien mas que les ponga atención y luego nos lamentaremos de los resultados, en el caso de estar casados, esto nos puede conducir a un adulterio o un divorcio; también descuidamos tanto a nuestros hijos, y como resultado crecen desorientados, cuando venimos a sentir ya están en problemas de alcohol, drogas, pandillas, en el hospital, en la cárcel o posiblemente en el cementerio etc. ¿Por qué? porque no estuvimos con ellos para orientarlos o dándoles la debida atención cuando nos necesitaban, veamos los consejos que Dios nos ha dejado escritos en su palabra, para evitar situaciones como las anteriores.
San Mateo 6:26-34.
26Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros; y vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que ellas? 27¿Y quién de vosotros podrá, por mucho que se afane, añadir a su estatura un codo? 28Y por el vestido, ¿por qué os afanáis? Considerad los lirios del campo, cómo crecen: no trabajan ni hilan; 29pero os digo, que ni aun Salomón con toda su gloria se vistió así como uno de ellos. 30Y si la hierba del campo que hoy es, y mañana se echa en el horno, Dios la viste así, ¿no hará mucho más a vosotros, hombres de poca fe? 31No os afanéis, pues, diciendo: ¿Qué comeremos, o qué beberemos, o qué vestiremos? 32Porque los gentiles buscan todas estas cosas; pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas. 33Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. 34Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal.
La solución es simple, lo que Dios nos dice en los últimos versículos, creo que si ponemos atención y lo ponemos por obra nos ira mejor en nuestra vida.
Bendiciones.
Apóstol y Pastor, Luis Molina.
“MCDD” Una iglesia para toda la familia.
www.ministeriosciudaddedios.org
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