Mostrando entradas con la etiqueta Adoradores de Dios. Ciudad de Dios. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Adoradores de Dios. Ciudad de Dios. Mostrar todas las entradas

miércoles, 3 de abril de 2019

Adoradores de Dios.

Adoradores de Dios.
     Adorar y amar, son dos cosas diferentes, por ejemplo, Los fariseos le preguntaron a Jesús, para tentarle, ¿Cuál es el gran mandamiento en la ley?
Vea la respuesta de Jesús.
San Mateo 22:36-40
36- Maestro, ¿cuál es el gran mandamiento en la ley? 37- Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma y con toda tu mente.
38- Este es el primero y grande mandamiento. 39- Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. 40- De estos dos mandamientos depende toda la ley y los profetas.
     Observemos, que el primer mandamiento es amar a Dios sobre todas las cosas y el segundo es amar a nuestro prójimo. Esto es hablando directamente sobre el amar o sea el amor. Es muy diferente el adorar o ser un adorador. Porque al único que es digno y merece toda adoración y alabanza es: ¡¡Dios. A nadie más!! No, a ninguna persona, ni santo, ni familiar, ni cosas ni a ningún hombre o mujer, a nuestros hijos, a los papás, a los abuelos. ¡A nadie más. A nadie tenemos que adorar! Al único, es a Dios, ¡¡no a las personas ni a las cosas!!
     Por ejemplo si usted dice ¡Adoro a mi hijo! a mi mamá, o mi papá o los abuelos. Etc la verdad es: Si así lo dice o lo hace está mal y se convierte en un adorador o idólatra de tal o cual cosa. He ahí la diferencia entre amar y adorar. O sea que no es pecado amar a sus familiares o al prójimo, es más, es un mandamiento de Dios. Pero eso no quiere decir, que nos convirtamos en adoradores de alguien más o de las cosas. Muchos cometen el error de decir: Adoro mi casa, adoro mi carro, adoro mi trabajo. Esto no se debe de decir ni hacer ya que es pecado, se convierte en pecado de idolatra.
Lucas 4:8. Respondiendo Jesús, le dijo: Vete de mí, Satanás, Porque escrito está:
Al Señor tu Dios adorarás, y a él solo servirás.
     Jesús nos enseña que muchos no sabemos lo que adoramos pero ;Dios anda en busca de adoradores que le adoren en espíritu y verdad.
San Juan 4:22.-24.
22- Vosotros adoráis lo que no sabéis; nosotros adoramos lo que sabemos; porque la salvación viene de los judíos. 23- Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre tales adoradores busca que le adoren. 24- Dios es es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que adoren.
     Cuando decimos ¡Te adoro! estamos adorando a una personas o a otras cosas, nos convertimos en adoradores de otras cosas: esto se llama idolatría y a las personas que lo hacen se les llama idólatras.
     Para terminar el punto es: Dios nos manda amar a Dios sobre todas las cosas y también amar a nuestro prójimo, pero no nos está mandando a que adoremos a nadie. Ya que nos convertimos en idólatras y la idolatría es pecado.
Bendiciones.
Pastor, Luis Molina.
MCDD. Una iglesia para toda la familia, para adorar y exaltar a nuestro Señor Jesucristo.